PROBLEMAS FRECUENTEMENTE TRATADOS

Técnica de origen japonés reconocida por el Ministerio de Sanidad de Japón desde 1957. Su esencia reside en la aplicación de presión con los dedos para el tratamiento de regiones que irradian dolor y para la recuperación y el mantenimiento del equilibrio armónico del cuerpo. El shiatsu es un tratamiento integral. Cada sesión trabaja todo el cuerpo, ya que su aplicación local generalmente tiene efectos temporales sobre los síntomas pero no sobre la causa. Comenzando por la zona más distal, suele no ser necesario trabajar directamente la afectada.

Existe un creciente cuerpo de evidencia empírica que muestra que el Shiatsu es útil en numerosas dolencias físicas y emocionales, mejora las funciones digestivas, respiratorias, circulatorias, linfáticas, urinarias y endocrinas, alivia la tensión y el dolor muscular, dolores de cabeza, espalda, cuello y articulaciones, dolor crónico, síndrome premenstrual, naúseas matutinas y molestias del embarazo, malestar menopáusico, fatiga, insomnio y trastornos del sueño, estrés o ansiedad.

El Sotai es una técnica muy eficaz y nada agresiva que busca mediante movimientos y posturas placenteros, posibilitar al cuerpo buscar su propio equilibrio liberándose de las contracturas, la rigidez y el dolor. Se basa en el conocimiento minucioso de la estructura del cuerpo y la relación de todas sus partes para aplicar movimientos guiados por el profesional en la dirección agradable, la opuesta a la del movimiento doloroso, y con una respiración dirigida. 

Resulta un tratamiento muy útil en dolencias articulares, dolor en región cervical o lumbar, acortamiento muscular, recuperación de la coordinación y el rango de movimiento y lesiones deportivas. En una sola sesión se pueden lograr grandes cambios.

Cualquier alteración de nuestro equilibrio físico, bioquímico o emocional, el cuerpo lo refleja en una debilidad muscular. La kinesiología aprovecha esta debilidad para averiguar su origen y aportar lo que el cuerpo necesita manteniéndolo de forma duradera. Es especialmente útil en personas con problemas crónicos cuando a pesar de intervenciones previas no responden adecuadamente, o cuando las pruebas diagnósticas no son reveladoras detectando desequilibrios antes de que se evidencien los síntomas.

El trabajo puede incluir movilizaciones articulares, técnicas de reflejos neurológicos, miofasciales, meridianos, nutrición clínica o evaluación de irritantes ambientales, obteniéndose excelentes resultados en alergias, intolerancias alimentarias, alteración de la flora intestinal, migrañas, trastornos de la menopausia y síndrome premenstrual, candidiasis, cistitis, problemas de ATM, dolor muscular o de articulaciones, fatiga y agotamiento, alteraciones del sueño, ansiedad y estrés emocional.

Técnica de masaje que combina el shiatsu facial y craneal con diversas manipulaciones profundas y armoniosas de los músculos faciales y del cuello mejorando notablemente el aspecto de la piel. Sus efectos son visibles tras la primera sesión y su uso regular es considerado un método natural de prevención del envejecimiento. 

Entre sus múltiples beneficios tonifica la musculatura, estimula la producción de colágeno, corrige líneas de expresión y arrugas, da forma al óvalo facial levantando y fortaleciendo los tejidos, activa la circulación sanguínea e incrementa la temperatura de la piel facilitando la eliminación de toxinas y un mayor aporte de oxígeno y nutrientes a las células, reduce bolsas y ojeras, aumenta la capacidad de la piel para retener agua y mantenerse hidratada, relaja zonas tensionales y proporciona una profunda relajación.